
La Justicia condenó a Joaquín Nahuel Escalante a 18 años de cárcel por intento de femicidio agravado contra una joven en Barrio Basualdo en 2022. El tribunal presidido por la Dra. Cecilia Labanca, junto a los jueces Lisandro Aguirre y Pablo Spekuljak lo halló responsable de tentativa de homicidio triplemente calificado por ensañamiento, por mediar violencia de género y por la relación que tuvo con la víctima.
El Ministerio Público de la Acusación estuvo representado en el debate por los fiscales Marcelo Nessier y Alejandro Benítez. El primero de ellos, además, fue quien dirigió toda la investigación.
Los fiscales esperaban una pena mayor, pero igualmente consideraron importante la determinada por los magistrados. «Aguardaremos los fundamentos del fallo para poder analizarlos y definir los pasos a seguir», advirtieron al terminar el juicio oral.
El primero de los hechos que la fiscalía le imputó a Escalante ocurrió algún día de septiembre de 2022. La víctima no lo pudo precisar. Él la amenazó para que volviera a su lado. Ella había escapado de la casa junto a su pequeño, cansada de maltratos de todo tipo. Buscó el amparo de su madre.
Por otra parte, el 20 de agosto del mismo año, luego de una discusión de pareja originada en un mensaje de Whatsapp que ella recibió, la golpeó y la atacó.
En octubre de 2022, Escalante le tendió una emboscada a la mujer. Le dijo que el hijo de ambos se había quebrado, por lo que ella se apresuró para llegar al domicilio del hombre. Apenas llegó, quedó claro que se trataba de un ardid. Tomó una cuchilla y se la apoyó en la espalda.
Algunos días más tarde, el 16 de diciembre, por la tarde, cuando la víctima estaba en casa de su madre, él la amenazó por redes sociales. No conforme con ello, fue hasta la vivienda, discutió con la mujer y le arrebató el teléfono de las manos, para luego arrojarlo contra el suelo. Para ese entonces, Escalante tenía respecto de la víctima una medida de distancia que poco le importó.
Lo más grave ocurrió poco antes de que terminara ese año, el 29 de diciembre. A media mañana, Escalante se escondió en una casa vecina a la de su expareja y aguardó con paciencia. Cuando ella salió con su moto se le abalanzó, la roció con alcohol, le prendió fuego y le clavó un cuchillo tipo «tramontina» en la espalda. Poco después iba a ser detenido por la policía.
Escalante fue condenado como autor de una tentativa de homicidio calificado (por haber sido cometido contra una persona con la cual había mantenido una relación de pareja; por haber sido por parte de un hombre y en perjuicio de una mujer, mediando violencia de género –femicidio–, y por ensañamiento). La pena a 18 años de prisión además se le impuso por otros hechos y lesiones, incumplimiento de mandatos judiciales; daño, y violación de domicilio. Todos cometidos en un contexto de violencia de género.
Con textos de El Litoral.
(Se obviaron en esta transcripción datos más puntuales y detalles)
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