Sociedad Informativa

"La verdad en cada noticia."

CORONDINOS EN LA ÚLTIMA BENDICIÓN DEL PAPA: NORBERTO E INÉS ESTUVIERON EN EL ÚLTIMO SALUDO DE PASCUAS DE FRANCISCO

Este domingo, el papa Francisco sorprendió a los fieles en la plaza San Pedro, al salir a saludar luego de la misa por el Domingo de Pascua, que fue oficiada por el cardenal argentino Leonardo Sandri. En silla de ruedas y sin las cánulas de oxígeno que había utilizado anteriormente, saludó a los presentes desde el altar principal. Al día siguiente, este lunes, el Sumo Pontífice falleció.

Norberto Peralta, oriundo de Coronda, estuvo durante lo que luego se resignificó como ‘la despedida’ de Francisco: en efecto, la de ayer su última aparición en público.  «Fue una de esas experiencias que te marcan para siempre, muy cargada de emoción, de espiritualidad», relató en diálogo con LT10. «Fue algo histórico, porque nosotros estábamos ahí en la plaza y queríamos ver si iba a poder dar la misa aunque sea un rato, pero nos decían que era muy probable que no porque estaba muy mal de salud. Y tuvimos la suerte de que saliera un ratito y hablara y para nosotros. Fue emocionante», se conmovió.

«La sensación de estar en el Vaticano es muy fuerte. Estar en esa plaza es histórico. Más sabiendo que el papa es argentino», agregó.  «Hoy cuando nos levantamos a las 7:30 de la mañana, entramos a las noticias y justo apareció que había fallecido. Para nosotros era una broma. Con las pocas palabras que dijo (en la plaza) se notaba que estaba mal, pero nunca pensamos que al otro día justo iba a fallecer», continuó.

Jerónimo, amigo de Norberto que comparte con él el viaje a Italia, se sumó a la conversación, y contó: «Si bien la misa la dio un cardenal, fue increíble cómo al finalizar la misa, la cantidad de gente, de todas las nacionalidades, todos se quedaban quietos y nadie hablaba, esperando algo. Nadie sabía si iba a aparecer Francisco, y al ratito, a los minutos se abre la cortina del balcón y sale».

Dijo «muy buenas Pascuas para todos», dos palabritas más y ya con eso se retiró. Se lo escuchaba muy débil», reafirmó.  De todas formas, coincidió con su amigo Norberto en que estar en el Vaticano es «una sensación muy especial», más aún «como argentino», con quien fue «el primer papa latinoamericano». Junto a Inés Angera, su esposa, también corondina de origen, estuvo en la despedida del pontífice.